domingo, 25 de noviembre de 2012

Objetivo cumplido

Todo comenzó y supongo que fue así, por una necesidad de encontrar respuestas a muchas incógnitas sobre la vida y sobre todo a las ganas tremendas de solventar una situación personal angustiosa.  Dentro de todo el conjunto de elementos que encajaban con mi verdad formaba parte Khira. Fue hace unos años que empecé a interesarme por sus espacios en televisión. Me gustaba escucharla, me sentía abierta a aprender de ella y también sentía admiración por su "servicio a los demás". De alguna manera yo también empecé a tener la necesidad de trabajar con el tarot y así fueron transcurriendo unos 4 o 5 años. Cuando me enteré que Khira impartía cursos presenciales de Numerología en Valencia me puse en contacto y así ha sido: mi primer nivel lo he podido materializar este fin de semana.
Lo que destaco de esta experiencia es que la información que me ha transmitido Khira viene a corroborar mi verdad. Opino que SOMOS RESPONSABLES DE NUESTRO CUERPO Y DE LAS DECISIONES QUE TOMAMOS CON RESPECTO A ÉL. ES EL UNICO VEHÍCULO QUE TENEMOS Y QUE NOS VA A ACOMPAÑAR HASTA EL FINAL.
Punto clave es lo que damos de comer a nuestro cuerpo, tanto en forma de nutrientes o alimentos, como en forma de pensamientos. "Si siembro en mi mente dudas, incertidumbre, auto-engaños, ansiedad, auto-desprecio, auto-exigencias, malestar, rabia, etc..... no puedo recoger respeto, amor, afecto, serenidad, honestidad, certeza, aprecio, bienestar, etc...
En mi opinión esto básico, lo que no nos han enseñado y de forma inconsciente lo tenemos automatizado y lo repetimos una y otra vez, como un círculo vicioso. Así nos va.
Por otro lado la numerología que enseña Khira es vital para el aprendizaje del camino de la vida y viene a aportar a la mia, tanto personal como laboral, herramientas que puedo unir a las que ya tengo  como tarotista. Es un camino muy interesante, me siento muy agradecida por haber tenido esta oportunidad y espero seguir en enero con el segundo nivel.

Me apetece mucho compartir en ese blog la oración de Khira:

"Padre Eterno por el cual todo el que cree en Tí tiene la vida eterna, porque en Tí confío. Dame tu paz, tu protección y tu luz y que permanezcas conmigo para siempre, tanto en esta vida como en todas las que he de vivir, pero siempre contigo y Tú siempre conmigo". Amén.

 


martes, 20 de noviembre de 2012

El destino ¿Quien lo marca?

Todos hemos culpado a algo o a alguien cuando las cosas no funcionan bien en nuestra vida. La tendencia a culpar o a culparnos es producto de lo que hemos aprendido y de manera consciente o inconsciente hemos incorporado en nuestra mente. Nada ni nadie es culpable en realidad. En mi opinión NO HAY NADA NI NADIE QUE TENGA EL PODER PARA OBLIGARNOS A PENSAR Y/O A ELEGIR LO QUE PENSAMOS Y LO QUE SENTIMOS.
Tomar las riendas de nuestra vida es nuestra responsabilidad y está a nuestro alcance. Las dificultades son inevitables, vienen con la vida. La forma como las vivimos hace la diferencia. Y todo empieza por un pensamiento.
El destino lo marcamos con nuestras decisiones. La suerte es el resultado de lo que hacemos con nosotros mismos.
 
 
 
 
 

jueves, 8 de noviembre de 2012

Vivir en el presente

"¿Las razones de tu sufrimiento? Querer controlarlo todo, desear que las cosas sean como tú quieres, aferrarse a lo que no puede ser, desear que el pasado sea diferente, querer que otros sean como tú quieres que sean, no aceptarte tal como eres en cada momento. En resumen, vivir en tu mente y perderte del presente"  Osho


jueves, 1 de noviembre de 2012

Quiero alas para volar

La crisálida

Había un niño caminando por el bosque y encontró la crisálida de una mariposa, la llevó a su casa para ver como salía. Miró como luchaba para forzar su cuerpo a través del pequeño hueco. El niño decidió hacerle las cosas más fáciles, así que sacó su cuchillo y cortó una ranura en la crisálida para permitir que saliera y ayudarla a volar. Cuando la mariposa salió no parecía normal; su cuerpo estaba inflamado y sus alas estaban pequeñas y dañadas. El niño estaba desilusionado y dolido, llamó a su abuelo para que viniera a ver esa mariposa extraña. Le contó cómo intentó ayudarla sin éxito. El sabio abuelo le explicó que cuando la polilla está luchando por salir está forzando los fluidos del cuerpo hacia las alas. Sin la lucha las alas no pueden crecer. Sin la lucha las alas de la mariposa nunca serían lo suficiente fuertes para volar y sin vuelo probablemente no sería capaz de sobrevivir. La moraleja es que el vuelo y la vida son la lucha. Sin retos y sin lucha nunca creceríamos ni alcanzaríamos nuestro potencial.